Entre
la ciudad de cuneo,
honorificada oportunamente con una Medalla de Oro por su contribución
a la lucha por la Liberación Nacional contra el nazismo y el fascismo; y la
ciudad de Santa Fe de la vera cruz, capital de la homónima
provincia, fundada como punto de encuentro y diálogo entre diferentes
poblaciones, primera en adherir al movimiento de Liberación de mayo del
1810, y sede de la Asamblea Constituyente del 1853 cuyas sesiones y
trabajos finales de reforma permitieron a muchos italianos, entre otros,
de emigrar a la Argentina; SE SANCIONA UN HERMANAMIENTO de carácter
cultural, político y económico.
La
ciudad de Cuneo, nacida con el signo de la libertad y con la constante
atención a la Carta Constitucional de la República Italiana, a los
principios propugnados por la Organización de las Naciones Unidas y a las
declaraciones de Helsinski; ha siempre reconocido con afecto a sus propios
hijos que por razones de trabajo y de necesidad han tenido que abandonar,
tiempo atrás, la tierra de origen para buscar fortuna y sustentamiento en
países lejanos donde llevaron su cultura, su tradición y su fuerza de
carácter, además del empeño y la inteligencia de su trabajo,
contribuyendo así a difundir, de un modo prestigioso e envidiable el
nombre de Italia y de Cuneo en el exterior.
De
esta premisas nace el interés de la ciudad por todos sus hijos dispersos
en el mundo, muchos de los cuales están en la Argentina, donde si bien
han encontrado una segunda patria elegida centro de sus intereses
cotidianos, no han olvidado la patria de origen. De esto, han dado prueba
cuando se juntaban entre las numerosas “familias piamonteses” a fin de
conservar la práctica de su lengua y de las tradiciones de la cultura
madre.
La
ciudad de Santa Fe, capital económica de la provincia y sede del gobierno
provincial, es además un centro industrial comercial y financiero, y
tiene en su historia, aunque sea ésta reciente -Santa Fe fue fundada en
1573-, numerosos testimonios de empeño por la libertad y la amistad entre
los pueblos, ubicándose siempre en la prima línea de cada posible ocasión
de iniciativas o reformas a favor de la dignidad humana.
Además,
la provincia de Santa fe ha sido la zona donde se establecieron mayor cándida
de italianos emigrados en la Argentina (el censo del 1895 señala que el
22% de la población de italianos vivía en la provincia de Santa Fe) y
todavía hoy, después de Buenos Aires, Santa Fe es la zona de mayor
presencia italiana, sin olvidarse que cuando se dice italianos se dice
sobretodo piamonteses y ligures, y entre los piamonteses, predominantes
fueron los cuneeses.
Y
si no es posible considerar la presencia de una comunidad de origen
italiana en el mundo como una realidad homogénea, se puede seguramente
decir que la emigración italiana en la Argentina, la cual gran parte es
de origen cuneese, representa un positivo testimonio de la capacidad, del
empeño y de la virtud de nuestra gente que ha sabido, con su trabajo,
merecer la estima y el respeto de todos.
Entonces,
para dar mayor fuerza y oficialidad a tales sentimientos y vínculos de
sangre, cultura y tradición se firma en esta ocasión entre los
ciudadanos de Santa Fe (gobernada en gran parte por descendientes de
italianos y cuneeses), y la ciudadanía de Cuneo, el presente acto de
hermanamiento entres sus dos ciudades, el que se desarrollará de acuerdo
al siguiente programa:
-
Trabajar
para desarrollar y consolidar la amistad entre los pobladores de ambas
ciudades y sus respectivos estados.
-
Intercambiar
delegaciones para un conocimiento recíproco de las dos experiencias
administrativas.
-
Establecer
programas de actualización e intercambios en los sectores escolares,
culturales, deportivos y económicos. En ésta última área se
prestará especial atención a la actividad agrícola.
-
Ampliar
las relaciones entre las estructuras sanitarias de Cuneo y de Santa
Fe.
-
Buscar
todas la formas posibles de favorecer la inserción en el mundo de
trabajo y de la producción de jóvenes de Santa Fe que deseen venir a
Italia.
Las
ciudades de Cuneo y de Santa Fe entienden de esta manera contribuir a la
causa de la paz en el mundo y al desarrollo de las relaciones amistosas
entre las respectivas poblaciones.
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